Estrat�gia & An�lise
ISSN 0033-1983
Principal

Artigos

Clássicos da Política Latino-Americana

Coluna Além das Quatro Linhas

Coluna de Rádio

Contenido en Castellano

Contos de ringues e punhos

Democracy Now! em Português

Democratização da Comunicação

Fale Conosco

LARI de Análise de Conjuntura Internacional

NIEG

Original Content in English

Pensamento Libertário

Publicações

Publicações em outros idiomas

Quem Somos

Sobre História

Sugestão de Sites

Teoria



Apoiar este Portal

Apoyar este Portal

Support this Website



Site Anterior




Creative Commons License



Busca



RSS

RSS in English

RSS en Castellano

FeedBurner

Receber as atualiza��es do Estrat�gia & An�lise na sua caixa de correio

Adicionar aos Favoritos

P�gina Inicial












































Artigos
Para jornais, revistas e outras mídias

Una percepción brasileña de las elecciones en Paraguay


Itaipu binacional, foco de disputa por el precio de la energía y probable fuente de ingresos si caso Lugo salga victorioso en contra de los dos aliados del sub Imperio de Brasil. Aguantará el golpe el Itamaraty?



La Adaga – número 12 – 16 de abril de 2008

1) Estas notas si proponen a evaluar los posibles impactos hacia y desde Brasil de la posible elección del ex obispo paraguayo Fernando Lugo, candidato por la Alianza Patriótica para el Cambio (APC). El religioso adepto de la Teología de la Liberación conforma alrededor suyo un frente de centro-izquierda que se jugó con todo para vencer a la candidata del Partido Colorado (ANR), oficialista hace 6 décadas, encabezada su lista por la ex ministra de la Educación Blanca Ovelar de Duarte. Blanca recibió el apoyo del actual presidente Nicanor Duarte Frutos. Y, como todos saben, la interna colorada es muy, pero muy zarpada. Concurre con estos dos a un gran conocido de la política brasilera de la década anterior. Si trata del general ex golpista y sospechoso de narcotráfico Lino César Oviedo. Oviedo se presenta por la Unión de Ciudadanos Éticos (UNACE) y va en tercero. Por último va Pedro Fadul, respectado por los partidos que componen la APC y a quién los partidarios de Lugo se encantarían de ver como aliado.

2) Según la última encuesta nacional, una encomienda del periódico ABC Color, Lugo ganaría el próximo 20 de abril. Los datos son públicos y conocidos, pero es conveniente repetirlos. Lugo tendría 33,6%; Blanca Ovelar 27,4% y; Oviedo, una fractura dentro de los 4% de paraguayos ocupantes del status-quo, este tendría 24,6%. O sea, incluyendo los márgenes de error, hay casi un empate entre el general que se organizó un golpe contra el entonces presidente Wasmosy (abril de 1996) y la ex ministra de la Educación. Como jugada de marketing electoral, Blanca se tira como “una mujer” y no “una oligarca” operadora de una facción de los Colorados. Si hubiera sido posible una concertación entre la Banda de Oviedo y los demás militares, empresarios y político-oligarcas, ni Lugo ni la centro-izquierda tendrían alguna posibilidad de victoria en las urnas. ¿¡En la lleca, bueno, es otro plan de laburo no es cierto?!

3) Volviendo para el debate desde una perspectiva de Brasil hacia Paraguay, este transcurre sobre las percepciones de las partes hablantes de la mediocracia y las élites con voceros en el Gigante que Duerme. No es necesariamente una evaluación prospectiva de la mayoría que poca o ninguna información tiene acerca del vecino hermano. El hecho real empieza afirmando que todo tema acerca del Paraguay que no sea un partido por la Libertadores o la Sudamericana, molesta y mucho a los que legislan la agenda política en Brasil. Veamos los porqués.

4) Brasil tiene presencia en el Continente como un Sub-Imperio con actitudes de disimulado. Cuando Lugo pone sobre la mesa el tema de la Hidroeléctrica de Itaipu, está enviando mensaje concreto. Aunque todo no pase de teatro electoral – cosa que no creo – el debate va a pasar por cuestionar la gravitación de Brasil, que por su propio peso pasa por arriba la soberanía de los países linderos.

5) Supongamos que Lugo salga vencedor, ganando a la ministra colorada y al ex general colorado. Aunque no venga a implantar ningún cambio de orden estructural, el y su equipo van a representar una liberación de energías que brotan y surgen desde los movimientos populares, particularmente Sin-Tierra y la Coordinadora Nacional de Sintechos, reforzados en la apertura de los ’90. Un ejemplo de conflictividad se dio estos días en Asunción, con los Sin-Techo confrontando las fuerzas antimotines, peleando por el cumplimiento del acuerdo de construcción de 3 mil viviendas en dos departamentos. El detalle observable es que esto se sucedió seis días de las elecciones.

6) Más allá de los costos de la energía de Itaipu, el tema de la soja y de los brasilguayos es problema seguro. La cultura de la soja actúa como cabeza de puente del avanzo del capitalismo en zonas selváticas, desplazando a poblaciones originarias. Los efectos si hacen notar en la capital paraguaya y otras ciudades mayores. Justo por eso que Paraguay necesita ingresos gruesos y constantes, siendo que el fuente más seguro de ingreso es el cobro por la venta de energía eléctrica, vendida a precio subsidiado hacia Brasil.

7) El Estado de Brasil tiene una deuda impagable con Paraguay. Desde la masacre contra el gobierno de Francisco Solano López, pasando por la sostener a un tirano títere como Alfredo Stroessner, pasando por la ocupación con soja y pobladores de las zonas linderas con los estados de Paraná y Mato Grosso do Sul, entrando por el tema delicado de la vinculación orgánica con las bandas paraguayas de contrabando y tráfico, entrando en el tema de deuda externa paraguaya que durante años fue cobrada por Brasil – deudas de guerra, botín fiscal en la verdad; por todo eso, la deuda de los mandantes brasileños hacia el país guaraní es enorme e impagable. Mismo para una retórica de izquierda lavada y arrepentida como la de Lula y su banda, es menos incómodo tener a un traficante golpista como Oviedo en el Palacio de López do que a uno que sirva como herramienta para un cierto tipo de nacionalismo con intentos de desarrollo económico. En la política real, por más legítimas que sean las aspiraciones de los paraguayos, son los acuerdos con el agro brasileño sumados a la explotación de la electricidad de la binacional lo que importa.

8) Por fin, nunca es demás llevar en cuenta que la cosa se puede pudrir en Paraguay, con la victoria electoral de Lugo seguido de algún tipo de golpe o maniobra con esa intención. No es probable pero es una variable factible y nada fantasiosa.

enviar
imprimir






voltar